Conectar con las emociones, la clave del aprendizaje

Miércoles 28 de agosto de 2019

“Uno debe tener alegría asociada al aprendizaje”. Esta simple frase es la fórmula mágica de la psicóloga e investigadora Neva Milicic para lograr una buena educación, pero aclara que “no es tan fácil lograrlo”.

“Hoy existe una aversión a volver al colegio por la cantidad de pruebas y tareas, porque existe una violencia asociada a los deberes escolares y porque estudiar en la casa es considerado una intromisión del espacio escolar en la familia”, dice y agrega que si a este escenario se le suman los graves problemas en la salud mental de los chilenos, entonces la labor de los profesores hoy es muy difícil. Es por esto que hay que dar vuelta la situación. Según la doctora en Educación, las emociones positivas generan mayor irrigación cerebral, más sinapsis y, por lo tanto, “una construcción positiva  de la arquitectura cerebral”.

La propuesta es cambiar el esquema tradicional de los colegios e incorporar ambientes educativos que estimulen el aprendizaje. Citando a las neurociencias, agrega que la llave maestra es la empatía, lograr identificar la forma en la que el niño es capaz de conectar emocionalmente con lo que está aprendiendo. Si se logra esto, entonces se fijará el aprendizaje.

 Cómo llegar a la meta

Una de las técnicas que Neva Milicic promueve para lograr reconectar emocionalmente es estar presentes aquí y ahora para los niños, intentando lograr y luego fortalecer el vínculo personal con ellos. Los cuentos y el juego son clave para lograrlo porque a través de ellos se entienden las consecuencias emocionales de nuestros actos y de cómo afectamos a otros.

El ejemplo también es un pilar fundamental del proceso de vinculación emocional. “Uno aprende para bien y para mal de lo que otros hacen y si esa figura es importante para nosotros, entonces ese aprendizaje será más  significativo aún”, explica.  Los ritos también juegan un rol importante en el logro de los vínculos porque generan recuerdos que son experiencias emocionales significativas.

Según Neva Milicic el aprendizaje emocional es más difícil en sectores vulnerables, donde factores como el alcohol o las drogas impiden la formación de vínculos. Aquí el profesor toma un rol muy importante: si da afecto, si está disponible y es próximo, entonces se transforma en lo que se llama una figura de apego que ayuda en el proceso de aprendizaje.

Hay otros factores que interrumpen este proceso. Uno de ellos es la hiperconexión de los niños a través de las tecnologías. “Las investigaciones demuestran que hoy día hay una baja en la inteligencia emocional. Los niños están hiperconectados con la tecnología, lo que disminuye la calidad de los vínculos”, dice.

Otro elemento que evita la conexión emocional es el uso del celular, que dificulta la posibilidad de esta presentes en el aquí y ahora. Es por esto, que la psicóloga recomienda que profesores y alumnos limiten su uso solo a lo útil para el aprendizaje.

El bullying es también una forma de evitar la conexión emocional positiva. “Los colegios deben tener tolerancia cero al acoso escolar porque hay que generar seguridad en los niños y cariño en las aulas”.