El nuevo libro de la Red Educacional FIC

Martes 7 de diciembre de 2021

La Red Educacional FIC lanzó un libro que relata la historia de la llegada de los hermanos de la Inmaculada Concepción a Chile, en la década del 50 y la fundación de los dos colegios que la Congregación tiene en Talca: el Centro Educacional San Antonio (CESA) y el Luis Rutten (CELR).

La publicación se titula Educadores y Transformadores Sociales, la Huella de los Hermanos FIC en Talca y recorre los acontecimientos más importantes de la vida de la Congregación en la VII Región, a través de diversas entrevistas a testigos de la labor de los religiosos, diversos documentos históricos y escritos de los protagonistas de la época.

El hermano Diego Izquierdo, quien fue provincial de la FIC en Chile durante la investigación del libro, introduce la publicación, diciendo que éste cuenta la misión educativa de la institución en nuestro país, que «se fundamenta en el carácter impreso por los fundadores Luis Rutten y Bernardo Hoecken, que infundieron en los hermanos la vocación de ser formadores y educadores. De enseñar y evangelizar, especialmente a los más pobres».

En 68 páginas, llenas de fotografías inéditas, el hermano Gerardo van Vugt, quien fuera primer director del CESA y del CELR, relata cómo se gestaron los proyectos y de qué manera convocaron a la comunidad del sector Oriente de Talca, a ser parte de ambas instituciones, que requirieron de los vecinos ayuda en la edificación y puesta en marcha de los colegios.

Al cierre de la publicación, el actual provincial FIC, hermano Lucio Torres, habla del futuro de la FIC en nuestro oaís, que hoy solo cuenta con ocho religiosos, que mantienen la espiritualidad que sostiene tanto los centros educacionales de Talca y de la Región Metropolitana.

«No es difícil ver el futuro de las obras de la Congregación porque, aunque hoy solo somos ocho hermanos en Chile, el espíritu y el carisma se vive igual», dice. Y agrega: «Nuestra misión debe seguir con o sin nosotros, los hermanos. A estas alturas no podemos empezar una misión nueva, pero sí debemos enfocar nuestras fuerzas en las misiones que de verdad respondan a las necesidades de los pobres y eso lo haremos con la ayuda de los laicos», concluye.